PREVENCIÓN DE ACCIDENTES DE ESCALADA 2ª parte.
Más vale estar seguro
Como comentamos en el artÃculo anterior, algo relativamente sencillo de utilizar, en una situación de tensión y estrés, se puede convertir en un estorbo, sobre todo si no estamos suficientemente familiarizados con la maniobra que estamos realizando. Por ello, es conveniente garantizarse un buen aprendizaje y una buena asimilación de las maniobras básicas de seguridad. Ya que el empleo de estas, nos garantizaran una buena protección a la hora de practicar este deporte.
Como en la sección Técnica anterior, vamos a ver los diferentes problemas que pueden derivar de una mala utilización del material, o una mala utilización de la técnica empleada en algunas maniobras, los peligros y la forma de prevenirlos.
PASAR LA CUERDA POR EL DESCUELGUE
En escalada deportiva, escalada equipada con seguros altamente resistentes, donde las vÃas suelen tener un largo de cuerda de corta longitud, una vez que el escalador llega al final de la escalada se encuentra con el descuelgue. De estas instalaciones, una vez pasada la cuerda correctamente, es de donde nos descolgará nuestro compañero hasta el suelo.
Existen dos tipos de descuelgues, los abiertos ( foto 1 ), y los cerrados ( foto 2 )
Descuelgues abiertos
La maniobra a seguir en estos casos es sencilla, ya que sólo hemos de preocuparnos por pasar la cuerda como si de un seguro normal se tratase ( foto 3 ) y avisar a nuestro compañero para que nos sujete y comience el descenso.
Descuelgues cerrados
En estos tipos de descuelgues la maniobra de pasar la cuerda se complica un poco más, ya que generalmente encontramos anillas o eslabones cerrados que nos obligan a desatarnos para pasar por ellos el cabo de nuestra cuerda.
Esta sencilla maniobra provoca numerosos accidentes por causas difÃciles de creer, como perder la cuerda el escalador, olvidar pasarla por el descuelgue, no atarse correctamente, …
Como todas las maniobras de seguridad básica, antes de enfrentarnos a ella, deberemos practicarla y asimilarla en un lugar seguro. Ya que una vez colgados en altura las cosas no son tan fáciles como parecÃan, y es aquÃ, donde deberemos extremar las precauciones.
Lo primero que debemos hacer es atarnos al descuelgue mediante un cabo de anclaje o dos cintas exprés con los cierres opuestos ( foto 4 ). Quedarse colgados durante la maniobra tan sólo de una cinta exprés con mosquetones ligeros es muy peligroso, ya que se podrÃan abrir accidentalmente durante el proceso de la maniobra.
Una vez atados, pasamos un bucle de cuerda por la anilla del descuelgue ( foto 5 ), para más tarde hacer un nudo y unirlo mediante un mosquetón de seguridad al anillo ventral de nuestro arnés ( foto 6 ), asà estaremos en todo momento anclados a nuestra cuerda en un lugar seguro.
Un error muy frecuente es anclar este mosquetón al portamaterial de nuestro arnés, efectivo contra una posible pérdida de la cuerda, ya que la tenemos anclada a nosotros, pero muy poco efectiva en el caso de que fallara nuestro cabo de anclaje, o el descuelgue. Ya que al recibir el impacto de la caÃda, el portamaterial partirÃa.
Nos desencordamos y tiramos del cabo libre para sacarlo de la anilla y volver a encordarnos ( foto 7 ). Tan sólo nos queda deshacer el nudo del mosquetón ( foto 8 ) y advertir al compañero que nos tense la cuerda, para poder retirar con comodidad el cabo de anclaje, e iniciar el descenso.
Si la vÃa la va a realizar otro compañero posteriormente, podemos colocar mosquetones de seguridad propios en el descuelgue ( foto 9 ), asà ahorraremos tiempo, ya que la maniobra sólo lo hará el último escalador.
COMO ASEGURAR AL PRIMERO DE CUERDA
Asegurar al compañero desde el suelo supone psicológicamente una relajación que a veces se torna en desinterés y distracción, sobretodo cuando nos rodean conocidos y/o amigos, y esto es causa de numerosos accidentes.
Independientemente del sistema de frenado que usemos, previamente habremos estudiado la ficha técnica del fabricante que acompaña al aparato, el asegurador deberá estar atento al primero de cuerda, a su progresión y a su necesidad a la hora de utilizar la cuerda, vigilando en todo momento que la comba de cuerda que haya entre el sistema de frenado y el escalador, no sea excesiva.
Por otro lado, el asegurador deberá pensar en que sucederá si el primero de cuerda cae, y si se vera proyectado por el tirón de la cuerda hacia la pared o hacia algún saliente de la roca.
Se producen muchos incidentes, y algún accidente, cuando la diferencia de peso entre el asegurador y el primero de cuerda es muy acusada, ya que ante la caÃda, el asegurador se elevará por el tirón de la cuerda, perdiendo el equilibrio e incluso la pérdida del control de la cuerda ( foto 10 ).
La solución a este problema pasa por atarse a algún punto con nuestro cabo de anclaje, eso sÃ, si no queremos llevarnos un buen latigazo cuando se caiga el primero de cuerda, el cabo de anclaje deberá estar siempre en tensión.
Otro error grave que se comete a la hora de asegurar a un primero es intentar verle durante toda la vÃa, aunque para ello, nos tengamos que separar unos cuantos metros de la vertical, incluso se ven casos de personas separadas unos de 10 metros ( foto 11 ). En estos casos una caÃda del primero podrÃa desequilibrarnos e incluso arrastrarnos, aumentando asà la caÃda del primero.
La solución es sencilla, mantenerse siempre cercano a la vertical de la vÃa, y extremar la atención a la hora de asegurar cuando no veamos al compañero.
ES SEGURO LA ESCALADA EN “TOP-ROPE†?
Se llama escalada en “tope-rope†a la que se realiza con la cuerda pasada por la instalación del final de la vÃa y asegurada por el compañero desde el suelo. De esta forma la escalada carece de riesgo…
Debido a la sencillez del sistema, tan sólo hay que ir recuperando la cuerda del escalador y más tarde descolgarle hasta el suelo, hace que escaladores sin apenas conocimientos de las técnicas de seguridad básicas se aventuren a realizarla. El resultado, un número cada vez mayor de accidentes.
La gran perjudicada en este tipo de escalada es la cuerda, ya que sufre enormemente. Se habla de un valor de desgaste 10 veces superior al de su uso normal, según los estudios del fabricante EDELRID.
El motivo resulta fácil de entender, en cada escalada en “top-rope†cada metro de ascensión es descendido a continuación con la cuerda en simple, y este descenso daña la cuerda, sobre todo si lo hacemos excesivamente rápido, ya que se puede producir un sobrecalentamiento en el mosquetón por el cual pasa la cuerda.
Además, a esto hay que añadir en ocasiones, un mal emplazamiento del mosquetón del descuelgue, ya que la cuerda además, sufrirá rozaduras con la roca.
Al final obtendremos una cuerda con la camisa despeluchada, rÃgida y rizada ( foto 12), y lo que es más importante, con una capacidad de absorción de energÃa muy mermada. Para no tener sustos a la hora de escalar de primero es mejor que utilicemos otra cuerda, y dejemos para “top-rope†la que usamos con frecuencia.
Cuando varias vÃas terminan en un único descuelgue, nos podemos encontrar con un problema, si queremos instalar nuestra cuerda. Nunca pasaremos una cuerda por un mosquetón o anilla cuando en ellos se encuentre otra. Se han producido varios accidentes por quemadura por derretimiento en las cuerdas, debido a la fricción entre ellas.
La solución a este problema es añadir al descuelgue un mosquetón de seguridad propio por donde pasaremos nuestra cuerda ( foto 13 ) asà evitaremos el rozamiento entre las dos cuerdas. Sin duda la mejor opción es irte a otra vÃa y dejar esta para más tarde, asà evitaremos aglomeraciones y posible sustos ineccesarios.
Podéis encontrar más información relacionada en la sección "ArtÃculos".